Un niño sentado en el suelo de grava.
Lo hace en su propio zapato para evitar la molestia y la suciedad del suelo.
Estupendamente sencillo y sorprendente.
No se ni si ha sido premeditado, ni siquiera lo habrá pensado.
Mas básico no puede ser.
Gracias Alejandro por enseñarme este puequeño secreto.
5 comentarios:
Stefano...tu manera de mirar el mundo no dejará nunca de sorprenderme!!!!
lola
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Me encanta esta manera de entender las cosas, me recuerda al cuento de EL principito con el caso del cordero. Cosas tan simples como los adultos no somos capaces de verlas. Fantástico!!! Laura
no conozco al cuento de EL principito con el caso del cordero... dame pistas!
Cuando el principito conoce al narrador le pide que dibuje un cordero. Al no saber cómo, el narrador dibuja lo que sabe, una boa con el estómago hinchado, un dibujo que otras personas siempre habían interpretado como un sombrero. El principito, sin embargo, interpreta el dibujo de inmediato y exclama que no quiere una boa con un elefante dentro, sino un cordero. El narrador intenta dibujar algunos corderos, pero el principito las rechaza. Finalmente dibuja una caja y explica al principito que el cordero se encuentra dentro. El principito, quien puede ver el cordero dentro de la caja con tanta facilidad como ve el elefante dentro de la boa, lo acepta.
Constan
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